Tendiendo puentes entre la ingeniería y el derecho: El
Building Information Modelling (BIM) y su impacto en la obra pública
Resumen. - En el
presente artículo, el autor analiza la importancia del Building Information
Modelling (BIM) y sus beneficios para combatir la rigidez normativa con
respecto a la obra pública.
Abstract.
- In the
following article, the author analyzes the importance of Building Information
Modeling (BIM) and its advantages when combating regulatory rigidity in public
works.
Palabras claves. -
Ingeniería – BIM – Building
Information Modelling – Obra pública – modificación.
Keywords.
- Engineering – BIM – Building
Information Modelling – Public work – modification.
I.
Introducción
Desde los primeros ciclos de
la carrera de Derecho se nos enseña cual dogma de fe que el Derecho es “el
sistema de normas encaminadas a regir la vida de los sujetos y destinadas a la
obtención del bien común”, es decir, se parte de la premisa que, cual
ingenieros sociales, podemos cambiar la realidad a través de las normas
jurídicas con el objetivo de conseguir el bienestar general.
No obstante, con el pasar del
tiempo, en la práctica profesional, observamos que ello no es del todo cierto,
ya que incluso las normas jurídicas pueden generar consecuencias no deseadas,
como, por ejemplo, elevar los costos de transacción o potenciar externalidades
negativas.
Ese es el caso de la normativa
que regula la obra pública, ya que a pesar de las múltiples leyes y reglamentos
que la han regido desde 1980 hasta la fecha aún no se consiguen los resultados
esperados[1]. Todo lo
contrario, tenemos normas sumamente rígidas e ineficientes que privilegian el
cumplimiento de las formalidades y no la ejecución eficiente del proyecto.
Sin embargo, por primera vez
en la historia de la obra pública en el Perú apreciamos una modificación, que
si bien ha pasado desapercibida en el medio jurídico, representa un giro
copernicano respecto la forma cómo se ejecutan e interrelacionan las partes
intervinientes en un proyecto. Esta es la incorporación de las herramientas de
modelamiento digital a través de los siguientes dispositivos legales:
i.
Décimo primera disposición
complementaria final del Texto Único Ordenado de la Ley 30225, Ley de
Contrataciones del Estado (en adelante, LCE)[2]: Refiere que “[m]ediante Decreto Supremo se establecen
los criterios para la incorporación progresiva de herramientas obligatorias de
modelamiento digital de la información para la ejecución de la obra pública que
permitan mejorar la calidad y eficiencia de los proyectos desde su diseño,
durante su construcción, operación y hasta su mantenimiento.”
ii.
Numeral 4 del párrafo 8.2 del
artículo 8 del Reglamento del Decreto Legislativo 1252, Decreto Legislativo que
crea el Sistema Nacional de Programación Multianual y Gestión de Inversiones: Indica que es función de la Dirección General de
Programación Multianual de Inversiones del Ministerio de Economía y Finanzas
“[e]mitir las metodologías colaborativas de modelamiento digital de la
información, para mejorar la transparencia, calidad y eficiencia de las
inversiones.”
iii.
Medida de Política 1.2: Plan
BIM del Plan Nacional de Competitividad y Productividad, Decreto Supremo
237-2019-EF: Señala que “[a]nte los
persistentes retrasos y sobrecostos en el desarrollo de inversiones en
infraestructura, es necesario apuntar a la modernización y digitalización de
los sistemas de formulación y evaluación, ejecución y funcionamiento de los
proyectos de inversión. Una de las herramientas tecnológicas y digitales a
impulsar es la metodología colaborativa de modelamiento digital de la
información para la construcción (BIM, por sus siglas en inglés: Building
Information Modeling)”.
iv.
Disposiciones para la
Incorporación de BIM en la inversión pública, Decreto Supremo 289-2019-EF: Regula los principios para la adopción y uso del BIM[3], y los
criterios para su incorporación en los procesos de inversión pública[4]. Asimismo, aprueba la implementación del Plan
BIM Perú, el cual “tiene como propósito reducir los sobrecostos y atrasos en la
ejecución de infraestructura pública, hacer más eficiente su operación y
mantenimiento, así como propiciar la transparencia en los procesos de inversión
pública”. [5]
En ese
sentido, mediante el presente artículo desarrollaremos el impacto del BIM en la
obra pública. Para tal fin, primero, describiremos qué es el BIM y su
repercusión en el ciclo de vida del proyecto. Segundo, revisaremos la
experiencia comparada en el uso del BIM para corroborar los beneficios que la
teoría describe.
II.
¿Qué es el BIM?
El BIM es una “metodología de
trabajo colaborativo que documenta todo el ciclo de vida de la edificación y
las infraestructuras, haciendo uso de herramientas informáticas con el fin de
generar un repositorio único con toda la información útil para todos los
agentes que participan en él y durante todo su ciclo de vida[6]”.
Por su lado, Lui et al. lo
definen como: “Una representación digital de las características físicas y
funcionales de una instalación. El BIM es un recurso de conocimiento compartido
para obtener información sobre una instalación que constituye una base
confiable para tomar decisiones durante su ciclo de vida[7]”.
Figura 1: Ciclo de vida de un
proyecto.
Fuente: CiberSal, 2018
Por tal razón, el BIM
“es ese amigo que te aconseja y ordena tus proyectos porque tiene una
extensa experiencia internacional, porque tiene esa información que necesitas
al instante, ya que posee más de 35 años en el mercado global y uno de sus
pilares es compartir, difundir, colaborar con proyectos desde el inicio del
diseño y, sobre todo, crear una cultura de prevención[8]”.
A partir de las definiciones y descripciones precedentes acerca de lo que
es el BIM extrapolamos las siguientes premisas:
i.
El BIM es una representación
física y funcional de la obra.
ii.
El BIM es una metodología de
trabajo colaborativo.
iii.
El uso del BIM contribuye a
optimizar los resultados esperados durante todo el ciclo de vida del proyecto.
A
continuación, desarrollaremos cada una de estas premisas.
i.
El BIM es una representación física y funcional de la obra
La representación física y
funcional de la obra requiere la integración de una serie de programas
informáticos a través de los cuales se esquematiza el proyecto hasta en ocho
dimensiones, siendo estas las siguientes:
a)
BIM 3D (arquitectura +
estructura + instalaciones)
Representa la información del
diseño arquitectónico y cada una de las disciplinas que integran el proyecto.
Según, Fernández et. al.:
“Representa la integración de las diferentes
especialidades en torno a un modelo tecnológico (…), el cual puede ser creado
de manera colaborativa entre los diferentes profesionales. Esta interacción
virtual consolida la gestión del diseño, pues permite visualizar las
modificaciones que se deberían ejecutar al producirse cambios en el diseño y
brindar soluciones a las incompatibilidades desde las fases tempranas del
proyecto[9]”.
b)
BIM 4D (BIM 3D + programación)
La incorporación de la
programación permite superar la visión estática del proyecto reconociendo su
naturaleza dinámica. Para ello se vincula la estructura en 3D con programas
como Microsoft Project o Primavera P6 a través de los cuales se controla el tiempo.
Por ejemplo, si la entidad
determina que es necesario realizar las excavaciones para la construcción de
los sótanos con un metro de profundidad adicional al planificado, desde el
preciso instante en el que se modifican los planos en el modelo también se
modifica el plazo de las actividades afectadas.
Con el uso del BIM 4D la
discusión sobre la cantidad de días de la ampliación de plazo y la afectación
de la ruta crítica desaparecerá, ya que solo bastará revisar el Primavera P6 o
el programa elegido por las partes para la programación. Por lo que la
discusión estará limitada a verificar si el retraso justificante de la
ampliación es imputable a la entidad o a un evento de caso fortuito o fuerza
mayor[10].
c)
BIM 5D (BIM 4D + costos)
Uno de los elementos más
importantes en cualquier proyecto es el costo, por lo que se requiere un
control minucioso con el objetivo que la obra se ejecute dentro de lo
presupuestado. Para ello se suele usar los programas Presto, Arquímedes, entre
otros.
El BIM 5D permite elaborar el
presupuesto del proyecto a partir de la ingeniería de detalle (etapa de diseño)
y controlar los costos incurridos durante el transcurso de la ejecución de la
obra (etapa de construcción).
Por ejemplo, el BIM 5D
permitirá cuantificar de manera rápida y precisa los adicionales de la obra
generados por las órdenes de cambio de la entidad, en vista que desde el
momento en que se incorpora la variación en el modelo, este también arrojará la
información acerca del costo de la ejecución de dicha variación.
Ahora bien, el BIM 5D no solo
se limita a cuantificar aspectos relativos a la ejecución,
“En la fase operativa o de explotación también permite la
toma de decisiones sobre el control de costes. En primer lugar, porque anticipa
a esa fase calculando los costes de funcionamiento y mantenimiento de
componentes del proyecto, lo que permite valorar su adecuación en función de la
rentabilidad y durabilidad de los mismos. También permite analizar, calcular y
decidir cambios, modificaciones o reformas que contribuyan a un mejor
rendimiento y eficacia del edificio en funcionamiento[11]”.
d)
BIM 6D (BIM 5D +
sustentabilidad)
En este nivel se incorporan
criterios de “Green building” con el objetivo que la infraestructura sea
sostenible y amigable con el entorno. El BIM 6D
“permite testar y simular su comportamiento pasivo desde
el principio, permitiendo la toma de decisiones en cuanto a diseño en fases
tempranas que luego provocarán la necesidad de rehacer el trabajo ya hecho. Y
en cuanto a su comportamiento activo, una vez integradas las instalaciones de
confort térmico, se podrán realizar tantas simulaciones de rendimiento como se
deseen alternando los equipos instalados. La combinación de ambos nos permitirá
evaluar el modelo BIM creando variaciones e iteraciones en la envolvente, los
materiales utilizados, el tipo de combustible para enfriar/ calentar los
espacios del objeto de la construcción, etc. Teniendo en cuenta, además, su
emplazamiento geográfico, su posición y orientación, el nivel de soleamiento en
las distintas estaciones del año, las temperaturas de la zona, etc.[12]”.
e)
BIM 7D (BIM 6D +
mantenimiento)
Mediante esta dimensión se
gestiona el ciclo de vida útil de los activos del proyecto. Por ejemplo, luego
de ejecutada la obra en el mismo modelo se puede incorporar alertas a través de
las cuales asignamos fechas específicas que nos recuerden la realización del
mantenimiento. De ese modo, se “hace click” en una grúa y se anota que cada dos
meses se debe cambiar el aceite y los filtros. Por lo que, cuando se cumplan
dichos plazos el modelo emitirá las alertas para que el operador realice el
mantenimiento.
Ahora bien, este tipo de
acciones no solo permite prolongar el tiempo de vida del activo sino además
planificar futuros desembolsos mejorando el control de costos del proyecto.
La implementación del BIM 7D
permitirá a las entidades públicas tener una visión a largo plazo de la obra.
Un caso en donde falló este aspecto ocurrió en Italia (Génova) el 2018 cuando
el puente A-10 (conocido como Morandi) se derrumbó (siendo la falta de
mantenimiento una de las causas principales) provocando al menos 39 muertos y más
de una decena de heridos[13].
En tal sentido, el BIM no solo
permitirá un adecuado mantenimiento de las obras públicas sino además la
prevención de accidentes (daños patrimoniales y extrapatrimoniales) como el
descrito en el párrafo precedente.
f)
BIM 8D (BIM 7D + seguridad y
salud ocupacional)
Esta última dimensión nace
como respuesta al alto nivel de accidentalidad de la industria de la
construcción. Por tal razón, se ha visto conveniente adoptar medidas
preventivas desde la etapa de diseño a través del BIM 8D.
Según Kamardeen el BIM 8D
incluye fundamentalmente tres tareas: “(1) elaboración de perfiles de peligro
del modelo BIM, (2) presentación de sugerencias de diseño seguro para revisar
los elementos perfilados de alto riesgo, y (3) propuesta de controles de riesgo
in situ para los peligros incontrolables mediante revisiones del diseño[14]”.
Como se aprecia, a través de
las dimensiones del BIM se tiene un registro de información del pasado,
presente y futuro (ciclo de vida) de la obra desde todas sus aristas, lo que
permite un mejor control del proyecto [15].
ii.
El BIM es una metodología de trabajo colaborativo
Esta característica desmitifica la errada visión
que equipara al BIM con un software de diseño ya que es mucho más que eso, pues
implica un cambio en la forma como se ejecutan las obras a partir de su
conocimiento en tiempo real por parte de todos los agentes críticos del
proyecto.
En esa misma línea, Madeira et al (2016) afirma
que:
“BIM no es
simplemente una nueva forma de diseño o algo que afecta solo al diseño y
construcción de un edificio, sino un proceso centrado en el desarrollo, uso y
transferencia de un modelo de información digital de un proyecto de
construcción para mejorar el diseño, la construcción y las operaciones de un
proyecto o cartera de instalaciones[16]”.
En tal sentido, si antes se acostumbraba a una
ejecución descoordinada del proyecto, con el BIM se propende a un trabajo
conjunto lo que se materializa, por ejemplo, en que los agentes críticos
trabajen en un área común en donde se intercambia información de manera
constante y se reporta a través de reuniones semanales el avance de la obra.
Asimismo, se analiza las contingencias presentes y futuras con el objetivo de
buscar las mejores soluciones.
En esa misma línea, el numeral 3 del artículo 3 de
las Disposiciones para la Incorporación de BIM en la inversión pública, Decreto
Supremo 289-2019-EF, señalan que: “La adopción y uso de BIM debe garantizar la
máxima participación, comunicación e intercambio de información entre los
diversos involucrados en el desarrollo de una infraestructura pública, en cada
una de las diferentes etapas y fases del ciclo de inversión.”
Sin embargo, el nivel de colaboración no será el
mismo en todos los proyectos, ya que dependerá del Project Delivery System (en
adelante, PDS) elegido por el propietario y materializado en el contrato de
construcción.
¿Qué es el PDS?, es el método mediante el cual se
define la estructura de las relaciones entre las partes intervinientes de un
proyecto de construcción, sus funciones y la secuencia general de actividades[17]. Dicha
definición estará a cargo exclusivamente de la entidad en base a sus
requerimientos.
De esa manera, la decisión sobre si las labores de
diseño y construcción recaerán en un solo contratista mediante un contrato o en
dos contratistas con contratos independientes estará en manos de la entidad.
Los PDS más utilizados por la industria son los
siguientes:
a) Tradicional
b) Diseño y
construcción
c) Gerencia
d) Integrado
A continuación, verificaremos cómo se aplica el BIM
en cada PDS.
a)
Sistema tradicional (Design – Bid – Build)
En este PDS el contratista únicamente está obligado
a ejecutar la obra de conformidad con la ingeniería de detalle entregada por la
entidad, lo cual implica que cualquier indefinición y/o error será asumido por
esta última. De ese modo, la entidad está obligada a subsanar o entregar la
ingeniería faltante.
Este es el supuesto regulado en el artículo 32.7 de
la LCE al indicar:
“La
responsabilidad por la adecuada formulación del Expediente Técnico o Estudios
Definitivos corresponde al proyectista y a la supervisión, de acuerdo con el
alcance de los respectivos contratos, y la aprobación a la Entidad. De igual
modo, la entrega completa de la información que es puesta a disposición de los
postores corresponde a la Entidad.”
Somos de la opinión que el BIM es beneficioso en un
contrato de construcción bajo el sistema tradicional puesto que optimiza los
derechos y deberes de las partes. Como es el caso del deber del contratista de
avisar inmediatamente sobre los errores y/o indefiniciones en la ingeniería
entregada por la entidad [18]. Si bien este deber no se encuentra regulado
expresamente en el Código Civil puede interpretarse a partir de los siguientes
artículos:
1.
Numeral 2 del artículo 1774 del Código Civil: “El
contratista está obligado: (…) 2.- A dar inmediato aviso a comitente de los
defectos del suelo o de la mala calidad de los materiales proporcionados por
éste, si se descubren antes o en el curso de la obra y pueden comprometer su
ejecución regular.”
2.
Artículo 1362 del Código Civil: “Los contratos
deben (…) ejecutarse según las reglas de la buena fe (…)”
En tal sentido, si el contratista verifica (a
través del BIM) que hay algún error en la ingeniería durante la ejecución de la
obra, este tiene el deber de informarlo inmediatamente a la entidad, para que
esta provea la ingeniería faltante o corregida.
En esa misma línea, Arias- Schereiber y Cárdenas,
comentando el artículo 1774, señalan que:
“Se han hecho
críticas al artículo 1774, por cuanto no establece que el contratista debe dar
aviso al comitente sobre los defectos de la información técnica que le ha sido
proporcionado para la ejecución de la obra. De acuerdo con nuestro criterio la
objeción es válida, aunque la solución podría estar en la aplicación por
analogía del artículo bajo comentario[19]”.
Ahora bien, ¿cuál es el estándar de conducta
esperado para el cumplimiento del “deber de avisar”? El regulado en el artículo
1314 del Código Civil: “Quién actúa con la diligencia ordinaria requerida, no
es imputable por la inejecución de la obligación o por su cumplimiento parcial,
tardío o defectuoso.”
En otras palabras, como afirman Castillo y Rivas,
“el
comportamiento del obligado se confrontará con la lex artis, es decir, con el
conocimiento y ciencia que sean exigibles al profesional. Se añade que en ello
gravitan el estado y desarrollo de los conocimientos con el propósito de
responsabilizar al profesional que ignore los avances de la ciencia que se encuentren
a su disposición[20]”.
En tal sentido, el contratista incurrirá en
responsabilidad si: “no cumple con dar aviso” o “no avisa inmediatamente” y si
a raíz de dicho incumplimiento se generan daños a la entidad, de conformidad
con el artículo 1321 del Código Civil: “Queda sujeto a indemnización de daños y
perjuicios quien no ejecuta sus obligaciones por dolo, culpa inexcusable o
culpa leve”
El Navisworks es uno de los softwares integrados al
BIM 3D que permite identificar, por ejemplo, las interferencias entre los
planos de estructuras y los planos de instalaciones sanitarias. De ese modo, si
un tubo de agua intercepta una columna el contratista tendrá que dar aviso
inmediatamente para que la entidad corrija dicho error.
Imaginemos cuánto tiempo demorarían las partes
resolviendo estos problemas en el contexto de la obra pública sin la
tecnología. Con Navisworks desde el momento que el contratista identifica la
interferencia, la entidad también toma conocimiento de ella. En ese escenario,
las partes evitarán discusiones sobre la existencia del error en la ingeniería
y se reducirá el tiempo en su absolución.
Por otro lado, la entidad con el apoyo del BIM
podrá reducir el alcance de la obra anticipadamente para ajustar la retribución
pactada cuando el contrato sea por ajuste alzado, conforme la última parte del
artículo 1776 del Código Civil: “El comitente, a su vez tiene derecho al ajuste
compensatorio en caso de que dichas variaciones signifiquen menor trabajo o
disminución en el costo de la obra.” Ello le permitirá a la entidad adecuar el
proyecto a las nuevas necesidades que pudiesen surgir durante su ejecución.
Por tales razones discrepamos con Gray y Bravo
cuando afirman que: “Como los contratistas no asumen el riesgo del diseño bajo
este sistema de entrega de proyectos, su posición no mejora ni se beneficia del
uso del BIM por parte del propietario[21]”. Debido a
que como hemos demostrado el BIM genera beneficios en el ejercicio de los
derechos y deberes de las partes.
b)
Sistema Diseño y Construcción (Design – Build)
En este PDS la entidad le entrega al contratista
una ingeniería preliminar (conceptual, básica o básica extendida) para que
desarrolle la ingeniería de detalle y construya la obra con ella. En este caso,
cualquier error y/o indefinición en la ingeniería es asumida por el
contratista.
En obra pública, este sistema se encuentra regulado
en las modalidades de contratación llave en mano y concurso oferta, conforme el
artículo 36 del Reglamento:
“a) Llave
en mano: (…) Tratándose de obras, el postor oferta en conjunto la construcción,
equipamiento y montaje hasta la puesta en servicio y, de ser el caso, la
elaboración del expediente técnico y/o la operación asistida de la obra; b)
Concurso oferta: Cuando el postor oferta, la elaboración de expediente técnico
y ejecución de la obra.”
El BIM permitirá, al igual que en el sistema
tradicional, optimizar las labores de las partes. Al contratista, le brindará
las herramientas tecnológicas para preparar una ingeniería de detalle con la
menor cantidad de errores y/o indefiniciones.
El BIM 4D le posibilitará al contratista
compatibilizar mejor las interfaces entre las labores de diseño y construcción,
sobre todo cuando se ejecutan mediante fast-track [22]. Por
ejemplo, si se contrata a un subcontratista para que prepare el diseño y
construya la obra gruesa de una edificación, y a otro subcontratista para los
acabos, a través del BIM 4D se podrá controlar las interfaces de labores con el
objetivo de evitar cualquier retraso, más aún si el primer subcontratista
superpone las actividades de diseño y construcción.
Por el lado de la entidad, el uso del BIM le
permitirá tener un mayor control respecto el cumplimiento de sus requerimientos
técnicos (ingeniería preliminar).
c)
Sistema de Gerencia
En este sistema la entidad contrata una empresa que
actúa como facilitador del proyecto, con la finalidad que lo gerencie, ya sea
como un asesor técnico/legal (agency manager) o asumiendo la responsabilidad
por la ejecución, incluso desde la etapa de diseño (at risk manager).
La diferencia radica en que al gerente al riesgo se
le contrata para entregar un proyecto, en otras palabras, asume frente a la
entidad el riesgo del diseño y de la construcción. En cambio, el agente, solo
se limita a asesorar a la entidad sin asumir ningún riesgo, en vista que será
la entidad, quien finalmente decida qué proyectista y contratista es el idóneo
para su proyecto. En tal sentido, el gerente al riesgo actúa como un verdadero
contratista, conforme el artículo 1771 del Código Civil [23], y el
agente como un locador de servicios, de acuerdo con el artículo 1764 del Código
Civil [24].
En ambos casos, el BIM les permitirá un mejor
control del proyecto. Asimismo, podrán adoptar decisiones más informadas en
tanto cuentan con data contemporánea de la obra. De ese modo, el agente
brindará mejores recomendaciones a la entidad a fin de que esta tome decisiones
informadas. En cambio, el gerente al riesgo será quien las elabore e implemente
directamente.
Un ejemplo exitoso, ajeno a la LCE y su Reglamento[25], se
registró en la ejecución de las obras para los Juegos Panamericanos Lima 2019,
en donde se utilizó como marco legal y contractual los New Engineering Contract
(NEC), opción F (gerencia al riesgo) y los Project Management Office (PMO).
d)
Sistema Integrado
A diferencia de los anteriores sistemas en donde el
contrato de obra es celebrado por la entidad y el contratista, el contrato bajo
el sistema integrado se caracteriza por ser multipartito, es decir, lo celebran
todos los agentes críticos del proyecto (contratista, comitente, proyectista,
gerente agente o al riesgo, entre otros) con la finalidad de optimizar el nivel
de colaboración a partir de una asignación conjunta de riesgos positivos y
negativos.
En otras palabras, los ahorros se comparten y las
pérdidas de distribuyen entre todas las partes del acuerdo multipartito. A
menos que, “exista una disposición explícita (no implícita) hecha por las
partes que transfieren el riesgo a una de ellas exclusivamente[26]”.
En ese contexto, el sistema integrado tiene
características particulares que lo distinguen de otros PDS, siendo, sin ser
los únicos, los siguientes:
1.
Los agentes intervinientes del proyecto
(principales) se encuentran vinculados desde etapas iniciales (conceptualización)
y tienen participación en la toma de decisiones, las cuales se asumen por
consenso o en su defecto, por mayorías.
2.
Se le otorga a la etapa de diseño una real
importancia. Por lo que, tanto el propietario como el proyectista (incluso el
contratista) intervienen intensamente en la elaboración de una ingeniería
adecuada y con la menor cantidad de errores.
3.
Las relaciones contractuales tienen una estructura
distinta frente a otros PDS, en vista de que ya no se trata de contratos
independientes (de ingeniería, construcción o gerencia), sino de un contrato
que integra a los principales agentes intervinientes del proyecto.
De esa manera, veremos, por ejemplo, que un
contratista tendrá incentivos de brindar sus recomendaciones en la etapa de
diseño al proyectista porque sabe que, si la obra se ejecuta dentro del “costo
meta” será acreedor de un incentivo económico. Del mismo modo, el proyectista
tendrá una labor proactiva corrigiendo la ingeniería antes que el contratista
identifique el error durante la ejecución de la obra evitando así cualquier
retraso.
Al igual que la gerencia al riesgo, el sistema
integrado tampoco se encuentra regulado en la LCE ni su Reglamento, por lo que
se tendrá que recurrir a otra legislación como el caso de los Acuerdos de
Estado a Estado. Por ejemplo, podrían usar como marco contractual el
ConsensusDocs 300 con el Building Information Modeling (BIM) Addendum.
Ahora bien, ¿cuál es el PDS ideal para la
implementación del BIM? Madeira et. al. sostienen que “hay consenso en que, si bien
BIM puede aportar beneficios a los contratos diseño- licitación- construcción
tradicionales dirigidos por el empleador (en la medida en que BIM se regule
correctamente), ofrece mayores beneficios cuando el contratista participa
tempranamente (…) o cuando existen contratos de colaboración[27]”.
De esa manera, el papel del constructor en las
etapas tempranas del proyecto es fundamental ya que brindará recomendaciones
para que la obra tenga un alto nivel de constructividad[28].
Asimismo, como afirma Quiroz:
“El diseño básico del proyecto, aun siendo desarrollado desde modelos BIM, necesita de una validación constructiva que solo podrá darse con la inclusión del constructor, los subcontratistas y los proveedores. Por ello, el diseño de los proyectos desarrollados en BIM deben contemplar el proceso de conversión de los modelos de diseño inicial a modelos de producción[29]”.
iii. El uso de BIM contribuye a
optimizar los resultados durante todo el ciclo de vida del proyecto
La El BIM tiene una importante incidencia económica
en el BAM (Building Assembly Model) y en el BOOM (Building Operation
Optimization Model), ya que como afirma MacLeamy, por cada $ 1 dólar que se
invierte en la etapa de diseño se invierte $ 20 en construcción y $ 60 o más a
lo largo de la vida útil del proyecto por mantenimiento[30], conforme
se aprecia en la siguiente figura:
Figura 2: Curva de la
influencia de costos.
Fuente: Rocque, Bernice - Enabling effective Project sponsorship
En ese mismo sentido, Millasaky señala que
“[l]o que
se busca es invertir más tiempo y esfuerzo en la etapa inicial del proyecto
para conseguir grandes beneficios en las próximas etapas BAM y BOOM. Esto no
necesita mucha inversión al inicio, ya que los costos en la etapa de diseño son
mucho menores que en las próximas etapas. Por lo tanto, los cambios en esta
etapa no representan un gran impacto en el costo total del proyecto[31]”.
Por ejemplo, si se identifica un error, dependiendo
de la etapa del proyecto en la que nos encontremos, el costo de remediación
será diferente:
Etapa
del proyecto |
Algunos costos potenciales |
Diseño |
§
Corrige
o prepara otro diseño. |
Construcción |
§
Corrige
o prepara otro diseño. §
Elimina
la parte de la obra con vicios. §
Se
vuelve a construir a partir del diseño nuevo o corregido. |
Operación |
§
Corrige
o prepara otro diseño §
Elimina
la parte de la obra con vicios §
Se
vuelve a construir a partir del diseño nuevo o corregido §
La
obra no cumple su finalidad si la parte viciada es necesaria para el
funcionamiento de las demás partes. §
Si
se decide no eliminar la parte viciada puede aumentar el mantenimiento de
dicha parte para evitar que la obra no cumpla con su finalidad. |
Tabla 1:
Costos incurridos por la detección de un error en las etapas del proyecto
De ese modo, “[s]e debe asegurar que el BIM genere
ahorros en el uso de los fondos públicos a lo largo del ciclo de inversión, en
términos de reducción de sobrecostos y atrasos en la ejecución de la
infraestructura pública, así como en un uso racional de recursos destinados a
operación y mantenimiento[32]”.
III.
El BIM en la experiencia comparada en
materia de obra pública
El BIM no es ajeno a la obra pública en la
experiencia comparada, en tanto ya es utilizado con mucho éxito en la Unión
Europea, EE. UU. y en algunos países de Latinoamérica, como es el caso de
Chile, debido a sus importantes y concretos beneficios.
El EU BIM Taskgroup refiere que la propuesta de
valor del BIM se traduce
“en beneficios económicos, como un aumento de la
rentabilidad de los fondos públicos durante la fase de ejecución o la mejora de
la calidad de los bienes y servicios públicos durante la utilización del activo
construido. Para un responsable político al que le preocupe el rendimiento del
sector de la construcción, estos beneficios económicos se pueden agregar a
nivel nacional para respaldar unos niveles de productividad mayores (medidos
como PIB) y un mayor potencial de crecimiento (medido a través de las
exportaciones)[33]”.
En otras palabras, el costo de implementación del
BIM (adecuación informática y capacitación al personal vinculado a la ejecución
de la obra pública) es menor al beneficio micro y macroeconómico derivado de su
utilización. Es decir, el BIM es una inversión rentable a corto, mediano y
largo plazo.
Asimismo, el BIM genera beneficios medioambientales
y sociales para las entidades públicas en general. Respecto los primeros, el
uso del BIM reduce el “volumen de residuos que termina en los vertederos
gracias a una mayor precisión en los pedidos de materiales, o una simulación
optimizada de estudios energéticos que se traduce en una menor demanda de
energía por parte del entorno construido[34]”.
Por ejemplo, a través del BIM 6D se pueden ejecutar
las obras considerando su sostenibilidad. En términos de LEED Green
Certification System ello significa que:
i.
Se
controla la cantidad de agua requerida para la construcción. Se adopta las
medidas necesarias para su uso eficiente.
ii.
La
energía utilizada en el proyecto tenga el menor impacto atmosférico.
iii.
Los
materiales y recursos utilizados para la construcción no afecten el medio
ambiente.
iv.
El diseño
de los interiores de la estructura tenga como objetivo el uso de la menor
cantidad de energía en base al entorno climático (cálidos o fríos) en el que se
ejecute la obra.
Por otro lado, también se pueden obtener beneficios
sociales
“mediante una utilización eficaz de BIM en la
planificación y consultas públicas con el fin de obtener apoyo para las
infraestructuras públicas nuevas o renovadas (por ejemplo, ubicación de
autopistas, sistemas de contención de agua o reforma de edificios públicos).
Esta participación pública puede respaldar una infraestructura pública
correctamente diseñada y que responda a las necesidades de la comunidad local.
Esto puede traer consigo mejores resultados sociales, como una mejora en la
planificación de los recursos, un mayor uso de las instalaciones públicas o la
cartografía y protección de elementos del patrimonio histórico arquitectónico[35]”.
A nivel mundial, el líder en el desarrollo del BIM
en la industria de la construcción es EE. UU., quien desde el año 2003 lo
implementa tanto en el ámbito público como privado. Además, cuenta con guías
metodológicas y protocolos que permiten la interoperatividad de todos los
agentes intervinientes del proyecto y los órganos reguladores como el General
Services Administration (GSA) del gobierno federal[36].
En Europa, la implementación del BIM en la obra
pública comenzó en Reino Unido el 2011, en donde se obtuvieron resultados
sumamente favorables, ya que entre el periodo de 2011 y 2014 hubo una reducción
en el costo de los proyectos entre el 12% y el 20% lo que se tradujo en ahorros
del alrededor de 2,300 millones de dólares[37].
Posteriormente, como respuesta frente a los
resultados favorables del BIM, la Unión Europea a través de la Directiva
2014/24/UE del Parlamento Europeo y del Consejo estableció en el numeral 4 del
artículo 22 que: “Para los contratos públicos de obra y concursos de proyectos
los Estados miembros podrán exigir el uso de herramientas electrónicas
específicas, como herramientas de diseño electrónico de edificios o
herramientas similares” De esa forma, el uso del BIM en materia de obra pública
se convirtió en una realidad en la Unión Europea.
Entre los países que ya implementaron en sus
legislaciones lo señalado por la Directiva 2014/24/UE se encuentra España,
quien en el numeral 6 de la Disposición Adicional Decimoquinta de la Ley
9/2017, de Contratos del Sector Público, refiere: “Para contratos públicos de
obras, de concesión de obras, de servicios y concursos de proyectos, y en
contratos mixtos que combinen elementos de los mismos, los órganos de
contratación podrán exigir el uso de herramientas electrónicas específicas,
tales como herramientas de modelado digital de la información de la
construcción (BIM) o herramientas similares.”
Finalmente, en Latinoamérica, desde el año 2016 en
Chile se viene ejecutando el Plan BIM en el marco del Programa Estratégico
“Construye 2025”, a través del cual se “busca impulsar y dar valor a la
industria con la introducción de metodologías y tecnologías para el desarrollo
y operación de proyectos de edificación e infraestructura. En un principio, se
aplicará en el sector público de forma obligatoria a 2020[38]”.
IV. Conclusiones
La El BIM ha llegado para revolucionar la forma
como se ejecuta la obra pública y cómo se interrelacionan los sujetos
intervinientes en el proyecto, por lo que es imprescindible que los operadores
jurídicos estemos preparados para gestionarlo adecuadamente.
Para ello debemos comenzar comprendiendo que el BIM
no solo es un software, sino además es un método de trabajo colaborativo que
contribuye a optimizar los resultados esperados durante todo el ciclo de vida
del proyecto.
El BIM en la experiencia comparada ha demostrado
ser exitoso, generando grandes ahorros y mejoras en la consecución de los
objetivos del proyecto, lo cual repercute en la satisfacción de las necesidades
de los usuarios de la infraestructura.
Bachiller
en Derecho y especialista en Derecho de la Construcción por la Universidad
Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC). Especialista en Contrataciones del Estado
por la Universidad ESAN. Analista legal de NPG Abogados. Asistente de cátedra
en la Universidad del Pacífico en el curso Derecho de la Construcción. Mención
especial a mejor orador (2016) y miembro del equipo ganador (2015) de la
Competencia Internacional de Arbitraje organizada por la Facultad de Derecho de
la Universidad de Buenos Aires y la de Jurisprudencia de la Universidad del
Rosario de Bogotá. Miembro de Young International Arbitration Group y de
International Council for Commercial Arbitration.
[1] De ese modo, hasta la fecha se ha
promulgado el Reglamento Único de Licitaciones y Contratos de Obras Públicas
(Decreto Supremo 34-80-VC y modificaciones); la Ley de Contrataciones y
Adquisiciones (Ley 26850 y modificaciones); Ley de Contrataciones del Estado
(Decreto Legislativo 1017 y modificaciones) y la Ley de Contrataciones del
Estado (Ley 30225 y modificaciones), así como sus respectivos reglamentos.
[2] Vigente desde el 30 de enero de 2019,
conforme décima disposición complementaria final del Decreto Legislativo 1444
publicado en el diario oficial El Peruano el 16 de septiembre de 2018.
[3] Según el artículo 3 de las Disposiciones
para la Incorporación de BIM en la inversión pública, Decreto Supremo
289-2019-EF, los principios son: (i) eficiencia, (ii) calidad, (iii)
colaboración, (iv) transparencia, y (v) coordinación.
[4] Según el artículo 4 de las Disposiciones
para la Incorporación de BIM en la inversión pública, Decreto Supremo
289-2019-EF, se aplican los siguientes criterios: (i) progresividad, (ii)
condiciones de la organización, (iii) integralidad, y (iv) características de
la infraestructura.
[5] Artículo 5 de las Disposiciones para la
Incorporación de BIM en la inversión pública, Decreto Supremo 289-2019-EF
[6] GOSALVES, Jordi, et. al. BIM en 8
puntos. Todo lo que necesitas conocer sobre BIM. España: Es.BIM, 2016, p.
2.
[7] LUI, Fangxiao, JALLOW, Abdou, ANUMBA, Chimay
y WU, Dinghao. (2012) “Building knowledge modeling: integrating
knowledge in BIM”, Beijing, 9-12 de octubre de 2013, p.1. Consulta realizada el
22 de enero de 2020. Disponible en web: https://pdfs.semanticscholar.org/c020/2c81ca356608148dfaacd27f187fc2202ec8.pdf?_ga=2.76349525.1548575591.1579748407-309372318.1579748407
Traducción libre: “a digital representation of physical and
functional characteristics of a facility. A BIM is a shared knowledge resource
for information about a facility forming a reliable basis for decisions during
its lifecycle”.
[8] CÉSPEDES, Jesús,
y CORREA, Paul. (2018) “Ventajas competitivas con BIM / VDC”. En Revista al
servicio del desarrollo y promoción de la construcción Constructivo, vol.
20, núm. 131, octubre – noviembre 2018, p. 132.
[9]
FERNÁNDEZ, Leandro, RÍOS, Renzo, MARREROS, John.
“Más allá de la tecnología: BIM como una nueva filosofía”. En Revista
Civilízate, núm. 8, 2016, p. 47.
[10] Por lo que será necesario modificar el artículo
198 (Procedimiento de ampliación de plazo) del Reglamento con el objetivo de
adecuar el procedimiento al uso del BIM, en vista que, ya no se requerirá el
cuaderno de obra. Asimismo, tendrá que reducirse los plazos de la entidad para
resolver la procedencia de la ampliación de plazo ya que con el BIM será más
simple determinar la afectación de la ruta crítica.
[11] OLIVER, Inmaculada.
(2015) (Tesis) “Integración de la metodología BIM en la programación curricular
de los estudios de Grado en Arquitectura Técnico/ Ingeniería de Edificación. Diseño de una
propuesta.” Valencia: Universidad Politécnica de Valencia. p. 96.
[12] Ídem.
[13]
FOUNTAIN, Henry.
(25 de agosto de 2018) Diseño y mantenimiento del puente en Génova, Italia,
están bajo sospecha. El Nuevo Herald. (Disponible en: https://www.elnuevoherald.com/opinion-es/trasfondo/article217070475.html, consulta realizada el 22 de enero de 2020).
[14] KAMARDEEN, Imriyas. “8D BIM Modelling tool for accident prevention
though design. Egbu, C. (Ed) Procs 26th Annual ARCOM Conference”, Leeds, UK,
2010, Association of Researchers in Construction Management, p. 285.
Traducción libre de: “(1) hazard profiling of BIM model elements, (2)
providing safe design suggestions for revising high hazard profiled elements,
and (3) proposing on-site risk controls for hazards that are uncontrollable
through design revisions”.
[15] Tal nivel y profundidad en la información del
proyecto coadyuvará a prevenir y resolver más rápida y eficientemente los
conflictos que pudiesen surgir durante la ejecución de la obra. Por ejemplo, el
trabajo de la Junta de Resolución de Disputas se verá optimizado ya que además
de contar con información contemporánea del proyecto también esta tendrá un
alto nivel de confiabilidad. Ello además se ve potenciado con la participación
de técnicos (ingenieros, sobre todo) como miembros de la Junta de Resolución de
Disputas, los cuales están capacitados para interpretar la data del BIM.
[16] MADEIRA, Victor, FRAME, Shona, HENEGHAN,
Jarleth, JOHANSEN, Christian, MOORE, Joseph, y VOGEL, Sharon. “Legal aspects of
Building Information Modelling: a world view (Part I)”. En Construction Law
International, vol. 11, núm. 4, diciembre de 2016, p. 10.
Traducción libre: “BIM is not simply a new way to design or something
which affects only the design and construction of a building, but a process
focused on the development, use and transfer of a digital information model of
a building project to improve the design, construction and operations of a
project or portfolio of facilities”.
[17] MOORE, Dale. (2000) “Selecting
the best Project delivery system”, Project Management Institute Annual Seminars
& Symposium, Houston, 7 de septiembre de 2000.
[18] El artículo 40 (Responsabilidad del
contratista) del Reglamento hace referencia al Código Civil al indicar que: “(…)
se debe cumplir lo dispuesto en los numerales 2) y 3) del artículo 1774 del Código
Civil.
[19] ARIAS-SCHREIBER, Max y
CÁRDENAS, Carlos. Exégesis del Código Civil peruano de 1984. Tomo III. Lima:
San Jerónimo, 1989, p. 106.
[20] CASTILLO, Mario y RIVAS, Gino. (2014) “La
diligencia y la inejecución de las obligaciones”. En Ius Et Veritas,
núm. 48, julio 2014, pp. 130- 141.
[21] GRAY, Jaime y BRAVO, Jonnathan. “Liabilities for design defects in a collaborative integrated digital
age”. En Construction Law International, vol. 8, núm. 4, diciembre 2013,
pp. 19- 24.
Traducción libre: “As the risk of the design is not taken by contractors
under this project delivery system, their position is not improved nor do they
benefit from the use of BIM by owner”
[22] Es un sistema de gestión en el que la
preparación de la ingeniería se superpone con la ejecución de la obra para
reducir el tiempo.
[23] Artículo 1771 del Código Civil: “Por el
contrato de obra el contratista se obliga a hacer una obra determinada y el
comitente a pagarle una retribución”.
[24] Artículo 1764 del Código Civil: “Por la
locación de servicios el locador se obliga, sin estar subordinado al comitente,
a prestarle sus servicios por cierto tiempo o para un trabajo determinado, a
cambio de una retribución.”
[25] Ello es así porque la LCE ni su Reglamento
regulan el PDS del gerente al riesgo. Para los Juegos Panamericanos Lima 2019
se recurrió a un Acuerdo de Estado a Estado con el Gobierno Británico.
[26]
GRAY, Jaime y BRAVO, Jonnathan.
“Liabilities for design defects in a collaborative integrated digital age”. En Construction
Law International, vol. 8, núm. 4, diciembre 2013, pp. 19- 24.
Traducción libre: “there is an
explicit (not implicit) provision made by the parties transferring the risk to
one of them exclusively”
[27]
MADEIRA, Victor,
FRAME, Shona, HENEGHAN, Jarleth, JOHANSEN, Christian, MOORE, Joseph, y VOGEL,
Sharon. “Legal aspects of Building Information Modelling: a world view (Part II)”.
En Construction Law International, vol. 12, núm. 1, marzo de 2017, pp.
19-20.
Traducción libre: “there is a consensus that while BIM can bring
benefits under employer led traditional design-bid-build procurement contracts
(in so far as BIM is specified correctly), it offers greater benefits through
early contractor engagement (…) or where there are collaborative contracts.”
[28] LOYOLA, Mauricio y GOLDSACK, Luis. Constructividad
y Arquitectura. Santiago: Universidad de Chile, 2010, p. 12.
Al respecto, Loyola y
Goldsack precisan que la: “Constructividad describe la manera en que “un
diseño” facilita su posterior construcción; no la manera en que “un proyecto”,
“un tipo de administración” o incluso “un equipo profesional” facilita su
construcción. (…) Un diseño tiene un alto grado de constructividad si
“considera atentamente el modo en que se ha de construir el edificio y los
condicionantes prácticos que actúan en este proceso”.
[29] QUIROZ, Felipe. (2018) “Propuesta para la
aceleración e industrialización de la construcción con modelos BIM de
producción”. En Revista al servicio del desarrollo y promoción de la
construcción Constructivo, vol. 20, núm. 131, octubre-nomviembre 2018, pp.140-
142.
[30] MILLASAKY, C. (2018) (Tesis) Cuantificación
de los beneficios económico de subcontratar servicios BIM (Building Information
Modeling) en la etapa de diseño para proyectos de edificaciones en Lima
Metropolitana. Lima: Pontificia Universidad Católica del Perú.
[31] Ibid., p. 20.
[32] Numeral
1 del artículo 3 de las Disposiciones
para la Incorporación de BIM en la inversión pública, Decreto Supremo
289-2019-EF.
[33] EU BIM TASKGROUP (2016) Manual para la
introducción de la metodología BIM por parte del sector público europeo. Co-funded by the European Union. p. 18.
[34]
Ídem.
[35] Ídem.
[36] PAREDES, Gustavo. (2019) “El BIM se pone
el overall y encima la toga: La tecnología y el cambio en la gestión de las
disputas en construcción”. En Revista de Derecho Sociedad Jurídica, núm.
6, 2019, pp. 137- 156.
[37] Ídem.
[38] Equipo BIM Forum Chile (2017) Desarrollo del
BIM en Chile: entre el Estado y la Academia. BIM Forum Chile. Disponible en web:
http://www.bimforum.cl/2017/12/26/desarrollo-del-bim-en-chile-entre-el-estado-y-la-academia/. Consulta realizada
el 26 de enero de 2020.